El día más frío y la belleza escalofriante de Canadá: una historia helada del invierno de 1947 en Snag, Yukon

Durante una ola de frío en 1947, en la ciudad de Snag, Yukon, donde la temperatura alcanzó los -83°F (-63.9°C), se podía escuchar a la gente hablando a 4 millas de distancia, junto con otros fenómenos extraños.

En el duro invierno de 1947, la pequeña ciudad de Snag, ubicada en la pintoresca región de Yukon en Canadá, experimentó condiciones climáticas sin precedentes. En el transcurso de esta ola de frío, las temperaturas cayeron a unos asombrosos -83 °F (-63.9 °C) el 3 de febrero de 1947, lo que lo convirtió en el día más frío jamás registrado en la historia de Canadá. Estas condiciones extremas provocaron una serie de fenómenos impresionantes, incluida la extraña capacidad de escuchar a la gente hablando a cuatro millas de distancia, el aliento convertido en polvo y el estallido del hielo del río que parecía disparos. Entonces, ¿qué sucedió realmente en el increíble mundo bajo cero del Snag ese día?

El día más frío y la belleza escalofriante de Canadá: una historia helada del invierno de 1947 en Snag, Yukon 1
Ciudad cubierta de nieve. Funzug / Uso justo

Un paisaje sonoro escalofriante

Imagínese estar parado en medio del aire gélido, envuelto en capas y capas de ropa abrigada, y escuchando lo que parecían ser conversaciones desde lejos. Según los relatos de los residentes de Snag, durante esta extraordinaria ola de frío, el sonido llegó mucho más lejos y con mayor claridad de lo habitual. Sorprendentemente, se podían discernir conversaciones a una distancia de cuatro millas, una hazaña increíble que era prácticamente inaudita en condiciones climáticas normales.

El aliento helado se convierte en polvo

Otro fenómeno intrigante que desconcertó a los habitantes de Snag fue el efecto que el frío extremo tenía en su aliento. Al exhalar, su aliento se transformaba en partículas de polvo antes de descender con gracia al suelo helado. Esta transformación etérea añadió una cualidad de otro mundo al ya surrealista paisaje invernal. Para muchos, este extraño suceso solo enfatizó aún más el poder escalofriante de la Madre Naturaleza en Snag.

Los resonantes estallidos del hielo de los ríos

Como si las experiencias anteriores no fueran suficientes, los habitantes de Snag también fueron testigos de los extraordinarios sonidos retumbantes que emanaban del congelado río Yukon. El chasquido y crujido del hielo reverberó por toda la ciudad, haciendo eco como disparos y creando un paisaje sonoro espeluznante que fácilmente podría provocar escalofríos por la columna vertebral.

La ciencia detrás del extraño fenómeno de Snag

La combinación de bajas temperaturas y cambios en la densidad del aire jugó un papel crucial en la creación de estos fenómenos alucinantes. En condiciones de frío extremo, el aire se vuelve más denso, lo que permite que las ondas sonoras viajen mucho más lejos y con mayor claridad que en condiciones climáticas normales. Como resultado, las conversaciones se podían escuchar a largas distancias, lo que le daba a Snag un aura casi paranormal. Del mismo modo, la humedad del aliento exhalado se congelaba y cristalizaba rápidamente debido a las bajas temperaturas, transformándola en una sustancia parecida a un polvo. Por último, el intenso frío ejerció una inmensa presión y tensión dentro de la superficie del río solidificado, provocando que se agrietara y retumbara, generando sonidos similares a disparos.

Invierno gélido: la belleza de Canadá

Cuando se trata de clima extremo, Canadá es conocido por sus inviernos gélidos. Aquí están los 10 lugares más fríos de Canadá, siempre, o al menos desde que se llevan registros meteorológicos:

  • -63°C — Snag, Yukon — 3 de febrero de 1947
  • -60.6°C — Fuerte Vermilion, Alberta — 11 de enero de 1911
  • -59.4°C — Old Crow, Yukon — 5 de enero de 1975
  • -58.9°C — Río Smith, Columbia Británica — 31 de enero de 1947
  • -58.3°C — Iroquois Falls, Ontario — 23 de enero de 1935
  • -57.8°C — Bahía Shephard, Nunavut — 13 de febrero de 1973
  • -57.2°C — Fort Smith, Territorios del Noroeste — 26 de diciembre de 1917
  • -56.7°C — Príncipe Alberto, Saskatchewan — 1 de febrero de 1893
  • -55.8°C — Dawson City, Yukón — 11 de febrero de 1979
  • -55.6°C — Iroquois Falls, Ontario — 9 de febrero de 1934

Si bien estos inviernos glaciales de la tierra disuaden a algunos, otros ven los días más fríos de Canadá como una oportunidad para experimentar plenamente la belleza y la resistencia que este vasto país tiene para ofrecer.

Aceptando los desafíos

En lugar de rehuir el frío intenso, los canadienses han aprendido a aceptar y celebrar el clima desafiante. Muchas comunidades de todo el país celebran festivales de invierno, como el Carnaval de Invierno anual de la ciudad de Quebec, que presenta una gran variedad de actividades al aire libre que incluyen esculturas de hielo, trineos tirados por perros y carreras de canoas sobre hielo. Estos eventos brindan una oportunidad increíble para que tanto los canadienses como los visitantes se sumerjan en la alegría y la emoción de la temporada.

maravillas congeladas

Las temperaturas extremadamente frías también crean un fenómeno único que captura la imaginación de lugareños y turistas por igual. A medida que lagos, cascadas y ríos se congelan, surgen maravillas naturales impresionantes. Por ejemplo, el lago Abraham en Alberta se transforma en un impresionante lienzo de burbujas congeladas atrapadas bajo el hielo. Estas fascinantes formaciones, creadas por la liberación de gas metano de plantas en descomposición, se han convertido en un tema esencial para los fotógrafos que viajan de todo el mundo para capturar esta cautivadora vista.

Aventuras en el Gran Norte Blanco

Los días más fríos de Canadá sirven como señal para que los entusiastas de la aventura exploren el paraíso invernal del país, ofreciendo actividades como esquí de fondo, escalada en hielo, paseos con raquetas de nieve y motos de nieve. Los entusiastas de las actividades al aire libre acuden en masa a los parques nacionales, como Banff y Jasper en Alberta o Algonquin en Ontario, para maravillarse con los picos nevados, los prístinos lagos congelados y los paisajes panorámicos, lo que los convierte en experiencias inolvidables y oportunidades fotográficas increíbles.

Palabras finales

Si bien soportar temperaturas extremadamente frías puede no ser del agrado de todos, el día más frío de Canadá brinda una oportunidad única para experimentar la impresionante belleza y la extraordinaria resistencia de este increíble país. Desde festivales de invierno y maravillas heladas hasta emocionantes aventuras al aire libre, las temperaturas escalofriantes ofrecen la oportunidad de explorar y apreciar las maravillas naturales de Canadá en su esplendor helado. Por otro lado, la escalofriante historia de Snag se desarrolla como un momento extraordinario en la historia de Canadá. Sirve como recordatorio del impresionante poder de la naturaleza y su capacidad para dejarnos asombrados y humillados.


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